Hoy hablaré de mi visita a Universal's Studios Florida. Este parque forma, junto con Island’s of Adventures y el Universal City Walk, el gran complejo de ocio que estos estudios cinematográficos han construido en la Florida. En este caso, el parque se centra en el mundo del cine, trasladándonos a una especie de estudio de rodaje inmenso donde numerosas atracciones nos harán recordar muchas de nuestras películas o series favoritas.
La entrada es una enorme arcada art-déco, muy usual en los grandes estudios de Hollywood. De noche es aún más impresionante por los larguísimos focos que salen en forma de abanico de sus arcos. Production Central es la zona de entrada, donde diversos hangares nos transportarán a los lugares donde la industria cinematográfica crea las películas. De hecho, muchos de estas naves son platós televisivos reales donde se graban capítulos de muchas series de la televisión estadounidense. En otro de ellos se representa el espectáculo de los Blue Man Group en el que la música en directo, las pinturas y el humor se combinan y parece ser muy exitoso (para verlo hay que pagar entrada separada). Actualmente esta zona se encuentra en reformas debido a la instalación de nuevas atracciones. Las únicas operativas son dos, por el momento. La primera es Shrek 4D, situada dentro de uno de estas enormes naves. Tras la preceptiva cola, muy bien ambientada, especialmente al final (con intervención incluida de los Tres Cerditos, Pinocho y el Espejito Mágico), entraremos a una enorme sala de cine llamada “Ogrovisión” donde veremos una historia más de Shrek de corta duración en la que el fantasma del malvado Príncipe (que fue comido por la dragona ahora pareja de Asno) rapta a Fiona para tirarla por una enorme cascada y así poder casarse con ella una vez sea también una fantasma. Numerosos personajes del mundo de Shrek aparecen en este emocionante corto, donde el movimiento de los asientos, así como los diferentes efectos especiales y el 3D de la película impresionarán a más de uno.
La siguiente atracción es sin duda la más fuerte de este parque y la preferida por muchos. Se trata de la Rip Ride Hollywood Rock It, una rapidísima montaña rusa con altísimas caídas y grandes loopings. Lo mejor de todo es la personalización del recorrido que podemos hacer gracias a los dos altavoces que tenemos en el asiento y la pequeña pantalla delante de nosotros. Ahí elegimos los tipos de música (desde Dance y Rock hasta R&B y Country) y dentro de cada categoría hay cinco cantantes diferentes con una de sus canciones más populares. Nada más subirnos elegiremos que canción nos acompañará en la fuerte experiencia y sólo nos quedará disfrutar del trayecto. Las cámaras situadas en cada uno de los asientos nos filmará personalmente por lo que al bajar podremos ver nuestra cara durante el recorrido y si lo deseamos, comprar el DVD.
Siguiendo el recorrido llegaremos a la zona de New York, que recrea un pequeño barrio típico de Manhattan algunas décadas atrás, con calles, parques, plazas y callejones. Nosotros empezamos entrando en un supuesto rascacielos en obras que en realidad contiene la atracción Twister Ride it Out. Aquí haremos la fila mientras en diversas pantallas veremos como se grabó esta película dedicada a los tornados que se producen repentinamente en las praderas estadounidenses. Y también nos adentraremos en una casa supuestamente azotada por uno de estos fenómenos naturales, con un coche incrustado en el techo y todo, cuyos limpia parabrisas aún funcionan. Tras esto, entraremos en un enorme hangar donde se reproduce una plaza del típico pueblo del centro de los Estados Unidos, durante una noche de tormenta. Está muy bien conseguido el efecto de viento y agua así como las diferentes destrucciones que veremos hasta incluso ver una reproducción de un tornado en directo.
Continuamos paseando por la Quinta Avenida de los años 50 y nos topamos con una actuación en directo de los mismismos Blue Brothers, (los de verdad), acompañados de una estupenda cantante de blues negra. Estos dos amigos se criaron juntos en un orfanato, donde aprendieron este género. El espectáculo musical en directo que ofrecen involucra al público, creando un improvisado concierto en medio de una callejuela simulada de Nueva York. Los amantes de este tipo de música lo pasarán en grande.
Tras el espectáculo, y como hacía un poco de frío, corrimos a refugiarnos en el Louie’s, la pizzería donde tiene escena el famoso asesinato múltiple perpetrado por Michael Corleone en “El Padrino”. Ya que estábamos, nos sentamos en una de las mesas y comimos algo de pizza.
Continuamos metiéndonos en el museo egipcio, pensando en que algo relajado nos vendría bien para bajar la comida. Sin embargo, aquí dentro en realidad se encuentra otra de las mejores atracciones del parque: Revenge of the Mummy, en el que nos meteremos dentro de la tumba del famoso sacerdote Imhotep, en una montaña rusa a oscuras, con algunas pausas en salas llenas de momias guerreras, escarabajos o enormes efectos con bolas de fuego. Una experiencia muy divertida, sobretodo para todos los que disfrutamos de esta película.
Entramos después en la zona de San Francisco, perdiéndonos el espectáculo de Beetle juice’s porque ibamos muy cortos de tiempo. Decidimos entrar en Disaster!, una atracción donde nos explican en directo diversas maneras y trucos que utiliza la industria del cine para crear las típicas películas de catástrofes. Con nosotros, público, como protagonistas. Al principio, diversas personas del público, niños, abuelos y adultos, serán seleccionadas y luego utilizadas en un gran plató en el que se rodarán diversas escenas. En un primer momento no entenderemos gran cosa, ya que solo veremos enormes pantallas verdes fosforescentes, paisajes simulados y rocas de goma espuma caer. Después de todos estos rodajes pasaremos a una estación simulada del metro de San Francisco: Amity. Allí nos introduciremos en los diferentes vagones y avanzaremos por un túnel hasta llegar a la siguiente parada. Allí se nos simulará un catastrófico terremoto vivido desde un vagón del metro, con bruscos movimientos, explosiones, fuego, enormes cantidades de agua (200.000 litros) que inundarán el andén, un descarrilamiento de otro tren en la vía contigua (muy bien hecho) e incluso el hundimiento de la calle con la caída de un camión cargado de gasolina en la parada de metro. Es bastante curioso y mientras nos pasa todo esto nos estarán filmando también.
Al final, podremos ver un trailer sobre una película de desastres donde todas las escenas grabadas que en un principio no tenían ningún sentido para nosotros, ahora aparecerán muy claras. Las risas están garantizadas.
La siguiente zona simula el pueblecito costero en el que se rodó la mítica película Tiburón. Sin embargo, ahora está cerrado porque están reformando y actualizando la atracción. Así que rápidamente llegamos a una zona dedicada a la World Expo celebrada en Los Ángeles hace varias décadas. Allí nos espera lo primero un enorme estudio con gradas donde podremos ver en directo la grabación de un capítulo del famoso programa Fear Factor, de la factoría holandesa Endemol, donde los participantes se someterán a pruebas tan duras como aguantar colgados de una barra a decenas de metros de altura, a meter sus cabezas en urnas llenas de tarántulas, escorpiones, serpientes o escarabajos, así como a beberse un batido de marisco podrido con leche cuajada y gusanos. También tendrán que lanzarse pulpos vivos mientras sus compañeros intentan recogerlos con las manos. Algo muy típico en la televisión de este país.
Tras el desagradable show nos toparemos con un pabellón que a muchos nos será familiar: la sede de los Men In Black, estupendamente representada en su interior, con los dos marcianos llenos de manos controlando el panel central con la pantallota en forma de huevo. La atracción conocida como MIB Alien Attack es el recorrido que hace Will Smith en la primera película cuando entra al servicio de esta agencia y tiene que entrenarse en un recorrido que simula las calles de Nueva York llenas de extraterrestres de madera que van saliendo de ventanas, tiendas y cubos de basura. Nosotros iremos montados en modernos vehículos, armados con pistolas ultrasónicas, y deberemos apuntar y disparar a los ojos brillantes de todo extraterrestre que veamos. El contador de puntos que tendremos individualmente nos dirá al final quien es el ganador y si hemos batido algunos de los récords marcados por anteriores visitantes.
La siguiente atracción es la entrada de Krustyland, el parque organizado por Krusty el Payaso. Los fans de la mítica serie Los Simpsons entrarán encantados a The Simpsons Ride. Un simulador de vagón de montaña rusa nos llevará a un trepidante y mareante recorrido intentando huír de los intentos de asesinato del Actor Secundario Bob así como de Maggie, convertida en un bebé gigante tras colarse dentro del reactor nuclear de Springfield. Está muy bien hecha pero reitero que marea excesivamente.
Tras la atracción nada mejor que acudir al "Badulaque" o Kwick-E-Markt, donde aunque no encontremos a Apu, si veremos una gran selección de comics y libros de la serie de dibujos más famosa de los Estados Unidos, además de muchísimos objetos de recuerdo, destacando las latas de cerveza Duff o las pelucas largas y azules de Marge.
Continuamos paseando al borde del lago, con banderas de todos los países ondeando, hasta llegar a la última zona: Hollywood. Aquí encontramos el famoso boulevard en medio de Beverly Hills, con semáforos de época, tiendas perfectamente recreadas y la atracción de Terminator 2 en 3D, a la que no pudimos subir porque estaba cerrada. Mel’s Drive Inn es un dinner de los años 50 recreado con enorme exactitud, en la que brillantes coches de época están aparcados alrededor y en el interior chillones colores rosa y celeste en las paredes rodean la reluciente barra metálica. Los sillones de hule rojo en mesas con gramolas que funcionan con moneditas nos transportan a aquellos felices años mientras disfrutamos de una auténtica hamburguesa con patatas fritas y un dulce batido de fresa, vainilla o chocolate.
También obviamos la zona de Woody Woodpecker’s por estar enteramente dedicada a los niños pequeños, con la excepción de la atracción de E.T. Adventure, donde nos subiremos en las míticas bicicletas que E.T. hizo volar, y volaremos por encima del pueblo, huyendo de la policía y del FBI, y llegando al planeta de E.T., lleno de extraños E.T. Aunque la atracción sea para niños, a mi me turbó bastante esa imagen tan extraña de un planeta de criaturas raras y felices.
A la salida nos espera una enorme tienda de recuerdos, la Universal Studios Store, con recuerdos no sólo de este parque sino también del vecino. Es imposible no encontrar un recuerdo que nos guste. Hay de todo.
Saldremos al agradable Universal City Walk, una zona de ocio con un lago en medio rodeado de palmeras y restaurantes, cines, tiendas y una discoteca. Personalmente, lo que más me llamó la atención, además de la enorme bola del mundo de Universal, logo de la marca, que gira en una fuente, es el Hard Rock Café Orlando, el más grande del mundo.
Yo no sé que tienen estos locales que siempre tengo ganas de entrar en ellos. Ofrecen una carta amplia y variada con comida típicamente estadounidense y grandes cantidades. Los precios no son excesivos y si te pides uno de sus deliciosos cócteles, luego te puedes llevar un vaso nuevo de recuerdo.
El local es muy grande, con una cúpula y el mítico Cadillac rosa colgando, además de cientos de objetos de cantantes famosos mostrados en vitrinas y cuadros. Tras la cena, nada mejor que la tienda de recuerdos, también enorme, donde hacernos con una típica camisa o con algo más especial, como el Monopoly de Hard Rock Café. También hay un hotel anexo, pero ahí si que no fuimos.
Concluyo por tanto esta entrada junto con la anterior afirmando que el complejo de Universal en Florida es tal vez uno de los lugares más divertidos para gente de todo tipo y edad que podremos encontrar en este lugar del mundo. Un día aquí se nos hará muy corto, divertido e intenso. Las risas, aventuras, fotos buenas y recuerdos entrañables son algo que no faltará. Ahora toca ver el mega complejo de la factoría Disney. ¿Superará al de Universal?