Con sus 12 millones de habitantes, Metro Manila cuenta con un panorma nocturno bastante regular.
Sin duda, el vergonzoso hecho de que un número demasiado alto de estos habitantes vivan en la pobreza frena cualquier tipo de desarrollo económico, y por supuesto, algo tan secundario como el clubbing se ve tremendamente afectado. Además del gigantesco número de habitantes en situación de exclusión socioeconómica, la creciente clase media cobra salarios irrisorios (entre 150 y 300 euros al mes) que impiden tomarse apenas alguna alegría de vez en cuando.
Sin duda, el vergonzoso hecho de que un número demasiado alto de estos habitantes vivan en la pobreza frena cualquier tipo de desarrollo económico, y por supuesto, algo tan secundario como el clubbing se ve tremendamente afectado. Además del gigantesco número de habitantes en situación de exclusión socioeconómica, la creciente clase media cobra salarios irrisorios (entre 150 y 300 euros al mes) que impiden tomarse apenas alguna alegría de vez en cuando.
Si a esto sumamos el bajísimo número de turistas que visitan la ciudad (a diferencia de las muy concurridas islas) pues tendremos como resultado un panorama de fiesta bastante limitado para una metrópolis de semejante tamaño y con población tan joven y fiestera.
Dicho esto, he de decir que el panorama nocturno de Manila mejora a pasos agigantados y cada vez es más fácil encontrar locales con fiesta garantizada y de calidad cualquier dia de la semana. Esta entrada pretende dar una visión general y muy personal de la noche de Metro Manila para que todo aquel que visite la capital filipina o viva en ella, pueda tener una guía básica de donde bailar y beber durante las noches manileñas. Por supuesto, todo se basa en mi propia experiencia personal.
Una zona de fiesta muy de moda actualmente es el conocido como "The Fort", oficialmente Bonifacio Global City, un nuevo barrio ultramoderno, limpio y amplio de rascacielos acristalados. Lounges de primer nivel permiten empezar la noche para luego acabarla en un club de estándares internacionales. Respecto a los lounges, el más recomendable es Skye W - Lounge Bar en el terrado de un edificio de media altura, desde el que disfrutar de las vistas de los rascacielos de The Fort. Grandes aspas giran haciendo correr ligeramente el aire mientras potentísimos focos envían varios haces de luz al cielo. La música más del momento se combina con la chill out remezclada. El público, mayoritariamente de pie y alrededor de mesitas, bebe y charla en grupos y apenas baila. Está frecuentado por mucha gente guapa, joven y profesional con gran presencia de occidentales.
Tras las copas en Skye, una caminata o un cortísimo trayecto en taxi sin salir de The Fort nos dejará en Prive - Luxury Clubbing, una discoteca mediana tirando a pequeña que siempre se llena los sábados, aunque abra desde el martes. Buen lugar para bailar, aunque demasiados asistentes se empeñen en hablar a pesar del altísimo volumen de la música. Es cierto que el DJ suele pinchar buena música club y del momento. Aun así, se abusa demasiado del Hip Hop y del R&B, en mi opinión. Para saber más sobre este club, os recomiendo mi entrada en THE PINOY LIFE (mi otro blog) pinchando aquí.
Aunque ya tiene casi tres años, Prive sigue siendo uno de los clubes de referencia en Metro Manila cualquier dia de la semana. Últimamente he tenido la ocasión de ir un martes (fiesta de Weekday Warriors) que estuvo bien pero tranquial y con público mayoritariamente filipino. Además, los jueves es ahora la Model´s Night, que se llena de gente y con gran presencia de occidentales así como de locales dedicados a modelar o al mundo de la moda, como fotógrafos, periodistas o diseñadores. Además, los jueves por la noche la gente baila muchísimo y se forman buenas fiestas. Los jueves es común toparse con algún famosillo que rápidamente subirá al VIP. Una de las veces que fui estaba allí Vice Ganda, el famoso presentador de It´s showtime. En definitiva, Prive es el lugar de referencia aún en la noche de Metro Manila, sobretodo de jueves a sábado, y cualquier acercamiento a la noche de la ciudad no puede dejar fuera en ningún caso a este local.
Al lado de Prive están surgiendo otros locales, como por ejemplo el genial Imperial, un local de techos altísimos y forma cuadrada donde, a pesar de que la música es variada, se abusa a mi gusto del hip hop y el rap. En consecuencia, el público asistente vestirá con ropas anchas y gorras. Muchísimos expatriados africanos y afroamericanos convierten este local en su centro de diversiones. Sin embargo, la fiesta es buena, suele estar lleno y además tiene un pequeño secreto que vale la pena visitar: el Imperial Ice Bar, un bar complemente de hielo donde hace un frío que pela, en concreto cinco grados bajo cero, en contraste gran con la cálida y húmeda calle. Aparentemente había que pagar pero las dos veces que estuve entré totalmente gratis. Antes de entrar os pondrán un grueso abrigo blanco con capucha. La verdad es que hace tanto frío que uno no aguanta más de diez minutos dentro. Hay sofás, mesas, la barra, estatuas... todo esculpido en hielo. Incluso los vasos para los chupitos están hechos de hielo. Vale la pena tomarse un chupito de vodka Imperial con mango, piña o lichi en un entorno helado. No olvidéis tomaros una foto.
Aunque ya tiene casi tres años, Prive sigue siendo uno de los clubes de referencia en Metro Manila cualquier dia de la semana. Últimamente he tenido la ocasión de ir un martes (fiesta de Weekday Warriors) que estuvo bien pero tranquial y con público mayoritariamente filipino. Además, los jueves es ahora la Model´s Night, que se llena de gente y con gran presencia de occidentales así como de locales dedicados a modelar o al mundo de la moda, como fotógrafos, periodistas o diseñadores. Además, los jueves por la noche la gente baila muchísimo y se forman buenas fiestas. Los jueves es común toparse con algún famosillo que rápidamente subirá al VIP. Una de las veces que fui estaba allí Vice Ganda, el famoso presentador de It´s showtime. En definitiva, Prive es el lugar de referencia aún en la noche de Metro Manila, sobretodo de jueves a sábado, y cualquier acercamiento a la noche de la ciudad no puede dejar fuera en ningún caso a este local.
Al lado de Prive están surgiendo otros locales, como por ejemplo el genial Imperial, un local de techos altísimos y forma cuadrada donde, a pesar de que la música es variada, se abusa a mi gusto del hip hop y el rap. En consecuencia, el público asistente vestirá con ropas anchas y gorras. Muchísimos expatriados africanos y afroamericanos convierten este local en su centro de diversiones. Sin embargo, la fiesta es buena, suele estar lleno y además tiene un pequeño secreto que vale la pena visitar: el Imperial Ice Bar, un bar complemente de hielo donde hace un frío que pela, en concreto cinco grados bajo cero, en contraste gran con la cálida y húmeda calle. Aparentemente había que pagar pero las dos veces que estuve entré totalmente gratis. Antes de entrar os pondrán un grueso abrigo blanco con capucha. La verdad es que hace tanto frío que uno no aguanta más de diez minutos dentro. Hay sofás, mesas, la barra, estatuas... todo esculpido en hielo. Incluso los vasos para los chupitos están hechos de hielo. Vale la pena tomarse un chupito de vodka Imperial con mango, piña o lichi en un entorno helado. No olvidéis tomaros una foto.
Sin salir de The Fort, otro de los clubs que está en pleno apogeo, especialmente los sábados, es Hyve. Con una decoración en el techo ultramoderna, aunque menos espectacular en tamaño que Prive, Hyve bulle el fin de semana con público mezclado, tanto local como internacional entre el que se cuentan bastantes modelos. Con la música de más actualidad remezclada por DJs, muchas veces invitados que llegan desde fuera del país, Hyve ofrece una fiesta buena asegurada. La zona VIP, detrás de la cabina del DJ, es amplia y perfecta para observar la pista sin ser observado, ya que las potentes luces no dejan ver bien al que está arriba.
Otro club con buena música en the Fort es 7TH High. Modernísimo aunque algo pequeño. La pista de baile está rodeada de pantallas planas y un gran damero con luces cuadradas de todos colores recubre una amplia zona del techo, justo encima de la pista de baile. Suele estar frecuentado por jóvenes de todas nacionalidades, pero por debajo de los 25 años en muchos casos. Muchas de estas jovencitas suelen subirse al podium frente al DJ y bailar borrachas dando a veces un espectáculo algo bochornoso. Demasiado adolescente junto.
En Makati, ciudad más rica y occidentalizada de Filipinas, encontramos también interesantes lugares en los que pasar las cálidas noches de Metro Manila.
Uno de los núcleos de la fiesta en esta ciudad es el lujoso y tropical centro comercial Greenbelt. Numerosos bares permiten empezar aquí una larga noche de fiesta. Uno de los clásicos es Dillinger's 1903, pub al estilo irlandés modernizado donde tomar unas copas y charlar. Incluso tiene una zona VIP, con copas más caras, en la que podremos bailar algo. Para acceder aquí se hace a traves de la salida de emergencia. No hay ninguna indicación. Además, deberemos asegurarnos estar en lista una vez crucemos al pasillo secreto. La sala se llama Prohibition y es de las más elegantes y tranquilas de la ciudad, sin aglomeraciones y con buena música. Sin embargo, como dije, los precios son altos. El público es obviamente occidental o filipinos de clase media-alta. Últimamente está muy de moda.
Otros de los locales siempre llenos en este centro comercial es Café Havana, con su gran terraza donde ver a la gente pasar, tomarse un mojito y disfrutar de las canciones de música latina que suenan. Tal vez el mayor inconveniente sea que el público mayoritario sea gente mayor. Y me refiero a gente de más de 60 años. Además, abundan las prostitutas. Pero las tapas son buenas y es el mejor lugar en la ciudad para bailar salsa.
Para darse la fiesta en toda regla en Makati tendremos que entrar a Palladium, al lado de Greenbelt. Esta discoteca de estilo macro local ibicenco en pequeño y asociada a Amnesia Ibiza, cuenta con una pista en el piso -1 en la que empezar tomando algo, bailar y charlar, y con una espacio mucho más amplio y alto en en -2, con podium y muchas luces y pantallas por todo lado. Es una de las discotecas dónde más baila el público de todo Metro Manila. Fiestón en toda regla, con público algo más vulgar que en el resto de discotecas de la ciudad. Suelen frecuentarlo prostitutas de vez en cuando, al igual que pasa en Café Havana.
Otro club con buena música en the Fort es 7TH High. Modernísimo aunque algo pequeño. La pista de baile está rodeada de pantallas planas y un gran damero con luces cuadradas de todos colores recubre una amplia zona del techo, justo encima de la pista de baile. Suele estar frecuentado por jóvenes de todas nacionalidades, pero por debajo de los 25 años en muchos casos. Muchas de estas jovencitas suelen subirse al podium frente al DJ y bailar borrachas dando a veces un espectáculo algo bochornoso. Demasiado adolescente junto.
En Makati, ciudad más rica y occidentalizada de Filipinas, encontramos también interesantes lugares en los que pasar las cálidas noches de Metro Manila.
Uno de los núcleos de la fiesta en esta ciudad es el lujoso y tropical centro comercial Greenbelt. Numerosos bares permiten empezar aquí una larga noche de fiesta. Uno de los clásicos es Dillinger's 1903, pub al estilo irlandés modernizado donde tomar unas copas y charlar. Incluso tiene una zona VIP, con copas más caras, en la que podremos bailar algo. Para acceder aquí se hace a traves de la salida de emergencia. No hay ninguna indicación. Además, deberemos asegurarnos estar en lista una vez crucemos al pasillo secreto. La sala se llama Prohibition y es de las más elegantes y tranquilas de la ciudad, sin aglomeraciones y con buena música. Sin embargo, como dije, los precios son altos. El público es obviamente occidental o filipinos de clase media-alta. Últimamente está muy de moda.
Otros de los locales siempre llenos en este centro comercial es Café Havana, con su gran terraza donde ver a la gente pasar, tomarse un mojito y disfrutar de las canciones de música latina que suenan. Tal vez el mayor inconveniente sea que el público mayoritario sea gente mayor. Y me refiero a gente de más de 60 años. Además, abundan las prostitutas. Pero las tapas son buenas y es el mejor lugar en la ciudad para bailar salsa.
Para darse la fiesta en toda regla en Makati tendremos que entrar a Palladium, al lado de Greenbelt. Esta discoteca de estilo macro local ibicenco en pequeño y asociada a Amnesia Ibiza, cuenta con una pista en el piso -1 en la que empezar tomando algo, bailar y charlar, y con una espacio mucho más amplio y alto en en -2, con podium y muchas luces y pantallas por todo lado. Es una de las discotecas dónde más baila el público de todo Metro Manila. Fiestón en toda regla, con público algo más vulgar que en el resto de discotecas de la ciudad. Suelen frecuentarlo prostitutas de vez en cuando, al igual que pasa en Café Havana.
Ya fuera de la zona de Greenbelt encontramos otros locales divertidos en Makati. Uno de mis favoritos es Distillery, en Jupiter Street, muy pequeño pero muy divertido, con alguna gente bailando y siempre dispuesta a hablar. Además, cuenta con una zona acristalada donde encontrar todo tipo de alcohol y de todo el mundo. Desde vinos riojanos o sudafricanos a tequilas mexicanos exclusivos, rones de Nicaragua o incluso de Cuba (el famoso Havana Club) hasta licores de sabores tan poco comunes como el de rosa.
Algo más alejado del centro de Makati, cerca de la zona de la calle Padre Burgos, está el barrio rojo de la ciudad. Numerosos bares con espectáculos de prostitutas abundan en el barrio, así como otros bares de tipo más deportivo donde se emiten diversas competiciones (fútbol, Fórmula1, motos, baloncesto...). Más allá de estos locales, hay un lugar muy cerca donde poder seguir la fiesta hasta altas horas de la noche: Time. Situado en la avenida Makati, Time es un pequeño pero gran club para todos los que busquen algo de música house underground y también dance. Se siente realmente un ambiente "under" gracias al sistema de luces, a sus buenos DJ y a la estructura del lugar. Tiene tres pisos: el primero es donde está la pista de baile con la cabina principal del DJ y una barra. El segundo piso es un balcón alrededor de la pista de baile con una lounge y otra barra. Finalmente, el último piso tiene una terraza exterior con su propio bar y DJ. El público suele ser una mezcla de occidentales y filipinos modernos, con chicos y chicas por igual. Normalmente se llena a eso de las tres de la mañana.
Al lado de Time se encuentra Chihuahua, un local de música, comida y bebidas mexicanas.
Otro local estupendo, más por su público que por el local en sí, es Bond Urban Pub, conocido por sus míticas noches de modelos. Todos los martes se celebra esta noche aquí, herencia de la antigua noche que organizaba Tabu, antiguo nombre del local. Situado en mitad de Legaspi Village, Bond ofrece buenas fiestas martes, jueves y viernes, pero destaca la de los martes porque se convierte en un meeting point de todos los y las modelos de Metro Manila, destancando la presencia de brasileños y brasileñas. Las bebidas están bastante bien de precio en general y la música del momento suele ser muy divertida. Lo mejor de acudir un martes es que la gente está en bastante predisposición de hablar por lo que animados corrillos se forman dentro y fuera del local tanto de filipinos como de extranjeros. Aparentemente está todo un poco parado por Bond desde hace unos meses y las Model´s Night de la ciudad se celebran ahora los jueves en Prive, como ya señalé. Pero hay que estar antentos al próximo renancimiento del antiguo Tabu, Bond o como le quieran renombrar esta vez.
Algo más alejado del centro de Makati, cerca de la zona de la calle Padre Burgos, está el barrio rojo de la ciudad. Numerosos bares con espectáculos de prostitutas abundan en el barrio, así como otros bares de tipo más deportivo donde se emiten diversas competiciones (fútbol, Fórmula1, motos, baloncesto...). Más allá de estos locales, hay un lugar muy cerca donde poder seguir la fiesta hasta altas horas de la noche: Time. Situado en la avenida Makati, Time es un pequeño pero gran club para todos los que busquen algo de música house underground y también dance. Se siente realmente un ambiente "under" gracias al sistema de luces, a sus buenos DJ y a la estructura del lugar. Tiene tres pisos: el primero es donde está la pista de baile con la cabina principal del DJ y una barra. El segundo piso es un balcón alrededor de la pista de baile con una lounge y otra barra. Finalmente, el último piso tiene una terraza exterior con su propio bar y DJ. El público suele ser una mezcla de occidentales y filipinos modernos, con chicos y chicas por igual. Normalmente se llena a eso de las tres de la mañana.
Otra de las zonas de fiesta se encuentra cerca del aeropuerto, en uno de los complejos de ocio más completos de la ciudad. Se trata de Resort's World, donde poder asistir a musicales de Broadway en su moderno teatro, jugarse los pesos en su casino, comprar productos de lujo, comer en originales restaurantes o tomar un copa para luego bailar hasta las tantas. Nada mejor que empezar una noche en Opus, una amplísima sala de fiestas donde tomar algo y bailar al ritmo de las canciones de más rabiosa actualidad. Elegante, con gente guapa y buena música, este local cumple las expectativas para el primer tramo de la noche. Sin embargo, a medida que lleguemos a horas más de madrugada tendremos que movernos a Republiq, la gran discoteca del complejo. Bastante grande, con reservados a ambos lados y mucha gente bailando en la pista central, esta discoteca abusa de la música R&B y Hip Hop en muchas ocasiones. Pero la fiesta está asegurada, eso sí. Sus DJ y en ocasiones percusionistas en directo lo harán posible. Si tenéis la suerte de conocer a alguien importante en el mundo de la noche de Metro Manila podréis entrar al Cabana Club, zona privada de Republiq, una especie de mini-discoteca para gente cool, frecuentada por modelos, futbolistas y gente del mundo de la televisión. La música es muy parecida a la de Republiq pero aquí evitaremos aglomeraciones.
El público homosexual, o que busque presencia de travestis o drag-queens tendrá que poner rumbo a Malate, el barrio joven de clase media-baja de la ciudad de Manila. Justo detrás del paseo de Roxas, las calles paralelas bullen con diversos locales de calidad mediocre y músicas diversas para este tipo de público. Entre todos ellos destaca BED, por ser la discoteca más grande y moderna de todas.
En BED se suele pinchar buena música en general. Cuenta con un gran espacio central donde bailar con un breve espectáculo de drag-queens a mitad noche los sábados. Muy animada es también su agradable terraza dónde poder charlar con el volumen de la música mucho más bajo. Es abrumador el público masculino que acude a BED aunque es bastante frustrante que casi nadie baile, a excepción de algún occidental perdido por ahí. BED cerró el pasado mes de abril y reabrirá en breve en la zona de Greenfield District.
Precisamente Greenfield es un destino que empieza a surgir ahora como lugar donde tomar algo e incluso bailar buena música pinchada por DJ. Este nuevo distrito de Mandaluyong cuenta con numerosos bares con terraza que se agolpan en las arboladas aceras y una pizzería se transforma varias noches (especialmente los fines de semana) en un pequeño club (una especie de mini Privé) con parecida decoración y DJ. Se trata de UNO Lounge con público bastante ecléctico, predominando filipino pero también grupos de occidentales residentes en el barrio. Suele frecuentarlo un público gay de vez en cuando debido a su política friendly, aunque también es zona de modernos de todo pelaje. Cuenta con una zona superior con mesas y con una inferior con donde está la barra, el DJ y la pista de baile con luces. Su música es de las mejores de la ciudad. De hecho, suelen traer a DJs de todo el mundo, especialmente los sábados, ya sean de Singapur, Brasil o Europa. Los precios son muy asequibles y si nos entra hambre mientras bailamos, las pizzas son muy baratas, buenas y recién horneadas. Además, el público suele ser simpático por lo que podremos hablar y conocer a gente nueva.
Ortigas es otra de las zonas en las que están surgiendo algunos locales. Debido a su gran presencia de oficinas de diversas empresas, muchos de sus jóvenes trabajadores deciden vivir por aquí o quedarse de fiesta tras salir del trabajo. De hecho, otra de las mecas de los bares gay de Manila está aquí mismo, en Ortigas. Se trata de O Bar, un moderno y amplio local de música electrónica de público 99% masculino y gay, especialmente los sábados por la noche. Suele estar siempre lleno y los espectáculos de drag queens son especialmente valorados por los asistentes. La música es siempre de rabiosa actualidad con algunos guiños al pop, especialmente a las Spice Girls, de vez en cuando.
Por supuesto, son muchos más los locales que hay en Metro Manila para salir de noche. Además, zonas con The Fort están en constante movimiento por lo que en breve habrán muchas novedades. Conociendo un poco seguro que podremos pasar una noche de fiesta en Manila sin gastar en exceso.
No estaras por Manila ahora en Noviembre??? El finde 23-24???
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